Salvatore Ferragamo se convierte en Ferragamo. Con esta noticia nos sorprendía el mes pasado la casa de Alta Costura italiana, anunciando la llegada de «una conversación entre lo clásico y lo contemporáneo, basada tanto en la herencia como en una clara visión del ahora». Todo ello, «reconociendo la importancia de cada uno de los elementos en el conjunto, el viaje de la reinvención, el agudo sentido de la elegancia y el respeto al oficio, comienza en los cimientos: las letras que se utilizan, la forma que adoptan, las palabras que forman».